Corea del Sur declaró este jueves a la ciudad suroriental de Daegu y a la región circundante como una “zona de gestión especial” tras un enorme incremento en el número de infecciones por el nuevo coronavirus, algo que las autoridades municipales dicen amenaza con abrumar el sistema de salud de la región.
El primer ministro Chung Se-kyun dijo que el gobierno nacional concentrará su apoyo a la región para aliviar la escasez de camas, personal médico y equipo.
En la ciudad de Daegu y zonas aledañas se habían confirmado el miércoles y jueves 69 casos de personas infectadas que desarrollaron la enfermedad llamada COVID-19, así como la primera muerte en el país debido al virus, un aumento repentino que desató temores de que el brote se esté saliendo de control.
El repunte de infecciones en el área de Daegu y varios casos registrados en la capital Seúl, donde por el momento se desconocen las rutas que ha seguido la infección, obligaron al gobierno a reconocer por primera ocasión el jueves que el virus ha empezado a circular en la población local.
Corea del Sur ha reportado hasta ahora 104 casos de la enfermedad importada de China, donde más de 2,000 pacientes han fallecido entre 74,500 casos confirmados.