El Gobierno del presidente estadounidense, Donald Trump, anunció este viernes un acuerdo con México para «la suspensión del tráfico no esencial» en la frontera sur, en un esfuerzo coordinado para frenar la expansión de la pandemia del coronavirus, una medida similar a la pactada con Canadá el miércoles.
«Estamos tratando las fronteras de la misma manera, la frontera norte y la frontera sur», afirmó el presidente Trump antes de dar la palabra al secretario de Estado, Mike Pompeo, para anunciar formalmente la decisión en rueda de prensa en la Casa Blanca.
Pompeo señaló que ambos gobiernos han acordado la restricción del «tráfico no esencial», del que quedará exento el comercio.
«Ambos países saben la importancia de trabajar conjuntamente para limitar la expansión del virus y asegurar que el comercio, sobre el que se asienta nuestra economía, continúa», agregó Pompeo.
La medida entra en vigor mañana sábado y tendrá validez durante 30 días.
«Queremos asegurarnos de que las mercancías, el comercio, los trabajadores sanitarios continúan pudiendo cruzar la frontera. Pero el turismo y algunas actividades recreativas y otras cuestiones tienen que parar durante esta crisis», precisó Chad Wolf, secretario interino de Seguridad Nacional, en la misma comparecencia.
Uno de los anuncios más sorpresivos fue el realizado por Trump, quien informó que México también prohibirá los vuelos desde Europa como parte de los «esfuerzos coordinados», algo sin embargo no confirmado por las autoridades mexicanas.
UNA FRONTERA MUY ACTIVA
La frontera entre EE.UU. y México es una de las más activas del mundo, donde más de un millón de personas cruzan diariamente, lo que ha generado inquietud a ambos lados de la frontera por las alteraciones que se puedan generar.
«Ha sido una las principales prioridades asegurar que, sí, detenemos la transmisión del virus, pero a la vez mantenemos el flujo comercial, especialmente dado que comerciamos con México por valor de un millón de dólares al minuto», recalcó Henry Cuellar, legislador demócrata que representa a un distrito fronterizo del sur de Texas en el Congreso de EE.UU., en declaraciones al diario digital Politico.
La restricción del flujo transfronterizo con México se suma a la adoptada el miércoles con Canadá, y se enmarca en los esfuerzos de Washington por reforzar las medidas contra el coronavirus.
El Departamento de Estado emitió este jueves una alerta de viaje en la que instó a todos los estadounidenses a evitar los viajes al extranjero y regresar de inmediato si están fuera, a menos que cuenten con planes para quedarse en el exterior.
EE.UU. ha prohibido ya la entrada de viajeros procedentes de la Unión Europea, el Reino Unido y de China.
Las autoridades, particularmente a nivel estatal y local, han redoblado los esfuerzos contra la pandemia con crecientes restricciones para los ciudadanos dentro del país.
El estado de Nueva York ha decretado que todos los empleados de servicios no esenciales deberán dejar de acudir a sus puestos y trabajar desde sus hogares con el fin de reducir el ritmo de contagios, mientras California ordenó el confinamiento de la mayoría de la población,
El gobernador de California, Gavin Newsom, ordenó este jueves una cuarentena para los casi 40 millones de residentes del estado, decretó el cierre de negocios no esenciales y adelantó que se proyecta que el 56 % de sus residentes (25,5 millones) se infectarán con el nuevo coronavirus durante un periodo de ocho semanas.
Los casos de coronavirus en Estados Unidos, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, en inglés), superan ya los 10.000 contagiados y se han registrado 150 fallecidos, aunque cálculos extraoficiales hablan de 14.250 contagios y 210 muertes.